LA DIVINA MISERICORDIA
"Padre Eterno, te ofrezco el Cuerpo y la Sangre, el Alma y la Divinidad de Tu Amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo, por los pecados nuestros y del mundo entero. Por Su Dolorosa Pasión, ten Misericordia de nosotros y del mundo entero" (Diario, 476).
"Deseo que el mundo entero conozca Mi Misericordia" (Diario, 687)
"Oh Inconcebible e Insondable Misericordia de Dios, ¿quién te puede adorar y exaltar de modo digno? Oh Sumo Atributo de Dios Omnipotente, Tú eres la dulce esperanza de los pecadores" (Diario, 951).
El Señor me dijo: “Hija
mía, no dejes de proclamar Mi Misericordia para aliviar Mi Corazón, que arde
del fuego de Compasión por los pecadores. Diles a Mis sacerdotes que los
pecadores más empedernidos se ablandarán bajo sus palabras cuando ellos hablen
de Mi Misericordia insondable, de la Compasión que tengo por ellos en Mi
Corazón. A los sacerdotes que proclamen y alaben Mi Misericordia, les daré una
fuerza prodigiosa y ungiré sus palabras y sacudiré los corazones a los cuales
hablen.” (Diario, 1521)
PONER NUESTRA CONFIANZA EN DIOS
TENER SIEMPRE UNA ACTITUD MISERICORDIOSA CON LOS DEMÁS
INVOCAR LA DIVINA MISERICORDIA
PROPAGAR LA DEVOCIÓN A LA DIVINA MISERICORDIA
La historia del origen y de la difusión del mensaje de la Divina
Misericordia y de su devoción por todo el mundo, resulta ser
fascinante. Comprende apariciones y revelaciones extraordinarias,
respuestas milagrosas a oraciones, una escapada dramática de una Polonia
devastada por la guerra, una prohibición temporal del culto por la Iglesia
(1958 a 1978) y el fuerte apoyo del Papa Juan Pablo II, que muy
probablemente será llamado por los historiadores "Papa de la Divina
Misericordia." .
ASPECTOS ESENCIALES DE LA DEVOCIÓN A LA DIVINA MISERICORDIA
La misericordia es el amor que se esfuerza por aliviar la miseria de otros. Es un amor activo, derramado sobre otros para sanar, consolar, confortar, perdonar y quitar el sufrimiento. Es el amor que Dios nos ofrece y es el amor que Él exige de cada uno de nosotros hacia el prójimo.
"Si el alma no practica la misericordia de alguna manera no conseguirá mi misericordia en el día del juicio. Oh, si las almas supieran acumular los tesoros eternos, no serían juzgadas, porque la misericordia anticiparía Mi Juicio." (Diario, 1317)
INVOCAR LA DIVINA MISERICORDIA
«Pedid y se os dará... porque todo el que pide, recibe ... » (Mateo 7,7-8).
"Ofrezco a los hombres un recipiente con el que han de venir a la Fuente de la Misericordia para recoger gracias. Ese recipiente es esta imagen con la firma: JESÚS, EN TI CONFIO" (Diario, 327).
Dios quiere que nos acerquemos a Él orando sin cesar, arrepintiéndonos de nuestros pecados y pidiendo que Él derrame Su Misericordia sobre nosotros y el mundo entero.
"Ofrezco a los hombres un recipiente con el que han de venir a la Fuente de la Misericordia para recoger gracias. Ese recipiente es esta imagen con la firma: JESÚS, EN TI CONFIO" (Diario, 327).
«Tu tarea y empeño aquí en la tierra es implorar la Misericordia para el mundo entero». (Diario, 570)
"Que ningún alma tema acercarse a Mí, aunque sus pecados sean como escarlata" (Diario, 699).
"Soy el Amor y la Misericordia Mísma". (Diario, 1074).
«Me deleitan las almas que recurren a Mi Misericordia. A estas almas les concedo gracias por encima de lo que piden. No puedo castigar aún al pecador más grande si él suplica Mi Compasión». . (Diario, 1146).
"En la Cruz, la Fuente de Mi Misericordia fue abierta de par en par por la lanza para todas las almas, no he excluido a ninguna" (Diario, 1182).
"Mi misericordia es más grande que tu miseria y la del mundo entero... permití que Mi Sagrado Corazón fuera abierto por una lanza, y abrí la Fuente de la Misericordia para ti. Ven y toma las gracias de esta fuente con el recipiente de la confianza. Jamás rechazaré un corazón arrepentido" (Diario, 1485).
"He abierto Mi Corazón como una Fuente viva de Misericordia. Que todas las almas tomen vida de ella. Que se acerquen con gran confianza a este Mar de Misericordia" (Diario, 1520).
«Ningún alma que ha invocado Mi misericordia ha quedado decepcionada». (Diario, 1541).
"Las gracias de Mi Misericordia se toman con un solo recipiente y éste es la confianza. Cuanto más confíe un alma, tanto más recibirá" (Diario, 1578).
PROPAGAR LA DEVOCIÓN A LA DIVINA MISERICORDIA
. “A las almas que propagan la devoción a Mi Misericordia, las protejo durante toda su vida como una madre cariñosa a su niño recién nacido y a la hora de la muerte no seré para ellas el Juez, sino el Salvador Misericordioso” (Diario, 1075).
Una de las formas de devoción a la
Divina Misericordia es la propagación de la Devoción a la Divina Misericordia,
porque con ella también se relacionan algunas promesas de Cristo. “A las
almas que propagan la devoción a Mi Misericordia, las protejo durante toda su
vida como una madre cariñosa a su niño recién nacido y a la hora de la muerte
no seré para ellas el Juez, sino el Salvador Misericordioso” (Diario,
1075).
La esencia del culto a la Divina Misericordia consiste en la actitud de
confianza hacia Dios y la caridad hacia el prójimo. El Señor Jesús exige que
“sus criaturas confíen en El” (Diario, 1059) y hagan obras de
misericordia: a través de sus actos, sus palabras y su oración. “Debes
mostrar misericordia al prójimo siempre y en todas partes. No puedes dejar de
hacerlo, ni excusarte, ni justificarte” (Diario, 742). Cristo desea
que sus devotos hagan al día por lo menos un acto de amor hacia el prójimo.
La propagación de la devoción a la Divina Misericordia no requiere
necesariamente muchas palabras pero sí, siempre, una actitud cristiana de fe,
de confianza en Dios, y el propósito de ser cada vez más misericordioso. Un
ejemplo de tal apostolado lo dio Sor Faustina durante toda su vida.
"Debes mostrar misericordia al prójimo siempre y en todas partes. No puedes dejar de hacerlo ni excusarte ni justificarte. Te doy tres formas de ejercer misericordia al prójimo: La primera: la acción. La segunda: la palabra. La tercera: la oración. En estas tres formas está contenida la plenitud de la misericordia y es el testimonio irrefutable del amor hacia Mí. De este modo el alma alaba y adora Mi Misericordia” (Diario, 742).
“Haz lo que esté en tu poder para difundir la devoción a Mi
misericordia. Yo supliré lo que te falta. Dile a la humanidad doliente
que se abrace a Mi Corazón misericordioso y Yo la llenaré de paz. Di, que
soy el Amor y la Misericordia Mismos. Cuando un alma se acerca a Mí con
confianza, la colmo con tal abundancia de gracias que ella no puede
contenerlas en sí misma, sino que las irradia sobre otras almas. A las almas
que propagan la devoción a Mi misericordia, las protejo por toda su vida,
como una madre cariñosa a su bebe...”
(Diario, 1075).
“Escríbelo para muchas almas que a veces se afligen por no tener
bienes materiales, para practicar con ellos la misericordia. Sin embargo, el
mérito mucho más grande lo tiene la misericordia espiritual que no necesita
ni autorización ni granero siendo accesible a cualquier alma. Si el alma no
practica la misericordia de alguna manera no conseguirá Mi Misericordia en
le día del juicio” (Diario, 1317).
“A los sacerdotes que proclamen y alaben Mi Misericordia, les daré una
fuerza prodigiosa y ungiré sus palabras y sacudiré los corazones a los
cuales hablen” (Diario, 1521).
ORACIÓN PARA OBTENER LA DIVINA MISERICORDIA
¡Oh Dios de gran Misericordia! Bondad infinita, hoy toda la humanidad clama, desde el abismo de su miseria, a Tu Misericordia, a Tu Compasión. Oh Dios; y grita con la potente voz de la miseria. Dios indulgente, no rechaces la oración de los desterrados de esta tierra. Oh Señor, Bondad inconcebible que conoces perfectamente nuestra miseria y sabes que por nuestras propias fuerzas no podemos ascender hasta Ti, Te imploramos, anticípanos Tu Gracia y multiplica incesantemente Tu Misericordia en nosotros para que cumplamos fielmente Tu Santa Voluntad a lo largo de nuestras vidas y a la hora de la muerte. Que la omnipotencia de Tu Misericordia nos proteja de las flechas de los enemigos de nuestra salvación, para que con confianza, como Tus hijos, esperemos Tu última venida, ese día que conoces sólo Tú. Y a pesar de toda nuestra miseria, esperamos recibir todo lo que Jesús nos ha prometido, porque Jesús es nuestra esperanza; a través de Su Corazón Misericordioso, como a través de una puerta abierta, entramos en el Cielo. (Diario, 1570).
ORACIÓN DE JUAN PABLO II CONFIANDO EL MUNDO A LA DIVINA MISERICORDIA
Santuario de la Misericordia Divina, Cracovia . Sábado 17 de agosto de 2002
Dios, Padre Misericordioso, que has revelado Tu
Amor en tu Hijo Jesucristo y lo has derramado sobre nosotros en el Espíritu
Santo: Te encomendamos hoy el destino del mundo y de todo
hombre. Inclínate hacia nosotros, pecadores; sana nuestra debilidad; derrota
todo mal; haz que todos los habitantes de la tierra experimenten Tu
Misericordia, para que en Ti, Dios Uno y Trino, encuentren siempre la fuente
de la esperanza. Padre Eterno, por la Dolorosa Pasión y Resurrección de Tu
Hijo, Ten Misericordia de nosotros y del mundo entero. Amén.
CONTENIDO
LA NOVENA A LA DIVINA MISERICORDIA
COMO REZAR LA CORONILLA DE LA DIVINA MISERICORDIA
LA
DIVINA MISERICORDIA EN LAS SAGRADAS ESCRITURAS
ORACIÓN
PARA IMPLORAR FAVORES POR
INTERCESIÓN DEL SIERVO DE DIOS EL PAPA JUAN PABLO II
Oh Trinidad
Santa, Te damos gracias por
haber concedido a la Iglesia al Papa Juan Pablo II
y porque en él has reflejado la ternura de Tu paternidad, la gloria de la
Cruz de Cristo y el esplendor del Espíritu de Amor. Él, confiando totalmente
en tu infinita misericordia y en la maternal intercesión de María, nos ha
mostrado una imagen viva de Jesús Buen Pastor, indicándonos la santidad,
alto grado de la vida cristiana ordinaria, como camino para alcanzar la
comunión eterna Contigo. Concédenos, por su
intercesión, y si es Tu voluntad, el favor que imploramos, con la esperanza
de que sea pronto incluido en el número de tus santos.
Padrenuestro. Avemaría. Gloria.
Se ruega a quienes
obtengan gracias por intercesión del Siervo de Dios Juan Pablo II, las
comuniquen al Postulador de la Causa, Monseñor Slawomir Oder. Vicariato di
Roma. Piazza San Giovanni in Laterano 6/A 00184 ROMA . También puede enviar
su testimonio por correo electrónico a la siguiente dirección:
postulazione.giovannipaoloii@vicariatusurbis.org
.
© 2005-2007 JuanPabloMagno.org
Cualquier consulta sírvase dirigirla a : marisayeduardo@juanpablomagno.org